Content Curator

En una de las entradas anteriores hablé sobre uno de los problemas que hoy en día nos acecha: la sobresaturación de información y la incapacidad de analizarla eficientemente, hechos que incluso pueden llegar a generar angustia en el usuario, lo cual recibe el nombre de infoxicación. Comenté también que una de las soluciones para prevenir esta saturación es utilizar herramientas de curación de contenidos, las cuales actuarán de filtro y nos ayudarán a no abrumarnos ante tantos datos, es decir, nos ayudan a organizarnos.

Una vez comentados estos aspectos, me gustaría hacer referencia también a los Content Curator, ya que actualmente se está produciendo una eclosión de perfiles profesionales dentro del ámbito de la denominada web social y, es precisamente el perfil sobre el que voy a hablar uno de los más reconocidos y mejor valorados, aunque realmente no se trate de algo tan novedoso como algunos piensan, incluida yo misma antes de informarme sobre el tema en cuestión.

Según Dolors Reig, especialista en social media, el content curator "es un profesional, interno o externo, especialmente implicado con el conocimiento, y que asesorará sobre la información más relevante en el sector".

Se puede decir por tanto que son intermediarios críticos del conocimiento, los cuales se encargan de buscar, reunir, organizar y compartir de forma continua el contenido en línea más relevante en su ámbito de especialización para que otros puedan consumir y asumir toda esa información.

Son profesionales que se dedican a hacer una selección personalizada y de calidad del mejor contenido y de los mejores recursos sobre temas específicos. Realizan un servicio tremendamente valioso para aquellos que buscan información de calidad on-line.

Un buen content curator debe contar con una serie de habilidades que le permitan realizar sus funciones de forma eficiente.

Así, paso a continuación a exponer algunas de esas habilidades y, posteriormente, sus funciones básicas.

Habilidades con las que debe contar un content curator: entre otras muchas, señalo las más significativas:

• Profesional experto y especializado en la materia. Siempre a la última de toda la información y novedades que surgen en el sector que trabaja.

• Capacidad de análisis, evaluación y valoración.

• Capacidad de ponerse en la piel de su comunidad para saber qué es lo que quiere en ese momento.

• Gestor de tiempos. Capacidad de adecuación a los tiempos marcados.

• Curioso y creativo en la forma en que presenta la información para crear un mayor impacto en su comunidad.

• Capacidad de asumir el control de la situación a través de las mejores acciones e iniciativas.

• Con habilidades comunicativas y de redacción.

• Etc.

Entre sus funciones básicas destacan:

• Diseñar las estrategias de búsqueda, filtrado, organización, almacenamiento, utilización y difusión de la información.

• Localizar, identificar y seguir fuentes de información pertinentes, así como personas, grupos u organizaciones que traten los temas de su interés, además de estar alerta de las últimas tendencias y nuevas fuentes de información.

• Filtrar o cribar la información de interés de la que no lo es. Búsqueda,  localización y análisis de contenido relevante.

• Reutilizar o reelaborar contenidos externos a través de la simplificación de contenidos o la optimización de títulos con la finalidad de hacerlos relevantes.

• Analizar la repercusión de la información compartida y difundida con el objetivo de conocer la utilidad de la misma.

• Tener conocimiento de las herramientas de filtrado y difusión de la información.

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Para saber más:
Content curator
Curador de contenidos
Guía básica para el nuevo profesional de la información